lunes, 29 de septiembre de 2008

Luli-flequillo


Queridos lulilectores...


Hoy me he hecho flequillo.


Me veo rara. Me hace el frente como muy abultado.


A mi padre no le gusta, pero a mi madre sí.


¿Estoy fea?


Hm... no lo sé. Pero me apetecía probar.


Ya crecerá.


Besazzos,


*Luli*

viernes, 26 de septiembre de 2008

Uni-Luli, fase 2º: Primera Semana (APTA)



Queridos lulilectores...


Hoy finaliza mi primera semana como universitaria. Así, a grandes rasgos, estas son mis impresiones:


-Los profesores son extremadamente cultos (se refieren a las expresiones coloquiales como "vulgarismos" o "metáforas").


-El nivel de las clases es proporcional al nivel lingüístico de los catedráticos; es decir, altísimo (todo el rato me da la sensación de que ando más perdida...)


-La gente es maja: he conocido a bastantes más chicas y he intimado con los que mencioné el otro día -bueno, con algunos-. Especifico: (voy a decir nombres) Guille -el que parece gay-, Belén (está en casi todas mis asignaturas), Sara y Karina (las dos chicas que me siguen pareciendo un poco insustanciales, pero que son simpáticas). A parte, otros compañeros con los que he hablado e intercambiado direcciones de correo y eso -poco a poco-.


-El ritmo de vida que llevo es agotador, eso de ir y venir en tren me mata, estoy buscando piso y a ver si para octubre tengo suerte.


Y... poco más, en cuatro días no se pueden sacar muchas más impresiones generalizadas, y entrar ahora en detalles me parece una tontería, son nimiedades. Así que nada, me despido y dejo, al mismo tiempo, una lista de cosas para ir haciendo.


Besazzos,


*Luli*

martes, 23 de septiembre de 2008

Uni-Luli, fase 1º: Primer Día


Queridos lulilectiores...


Empiezo una nueva etapa de mi vida, a partir de ahora llamada "Uni-Luli" (Uni por universidad) y dividida en fases, quiero manteneros informados. Hoy, día histórico, ha sido mi primer día en la Universidad. Seré breve (como mi día).


Me he levantado a las seis de la mañana y, a eso de las ocho y cuarto, ya me encontraba delante del aula correcta (sin perderme ni una sola vez, yujúuu). Había bastante gente y, como mi cara debía mostrar ciertos rasgos de desorientación, una chica se ha presentado y hemos empezado a hablar.


A las ocho y media hemos entrado a la primera clase, que es Historia de la Comunicación, y el profesor (un ser culto y parlanchín que se enrollaba como las persianas) ha usado palabras como "distendidamente", entre otras. También hacía uso de frecuentes -y no malas- ironías, aunque ha pecado de vanidoso al explicar algunas de ellas, como si no las hubiéramos captado. La clase de inauguración sólo ha durado una hora, pero se me ha hecho eterna.


La segunda clase, aunque más larga, no ha parecido eterna por la simple razón de que hemos hecho un concursito por grupos para establecer equipos de trabajo para el curso. El profe: un tipo pasota y pelín despistado, aunque más joven que el anterior.


En cuanto a la gente... veréis, no es exactamente el tipo de gente a la que yo me hubiera dirigido, pero como se han dirigido a mí, es evidente que es mejor eso que nada. He conocido a 6 personas -en concreto-:


1) Chica que me recuerda a la lisssta (mona, bajita, rubia, callada y matrícula de honor). Apto.


2) Chica de pueblo, habladora, de pueblo, pelín (pelín) vulgar, de pueblo. Apto


3) Chico bastante loco, pelín aplumado. Apto


4) Graciosillo de la clase. "Guaperas" entre comillas, extrovertido, chuleta. Apto


5 y 6) Dos chicas algo insustanciales, aparentan tener menos edad. Aptas.


Repito que es mi primera impresión y que no los juzgo, sólo explico las sensaciones que me han transmitido.


Por lo demás... en mi clase seremos unos 60 0 70, así, a ojo, y hay mucha niña mona (ejem, pijinas) y algún que otro freak. Veremos como acabo...


A la una y media ya estaba de nuevo en mi poblucho natal.


Besazzos!!


*Luli*

domingo, 21 de septiembre de 2008

¡¡¡Socorrooo!!!



Queridos lulilectores...


Mi ausencia es debido a que... síp, me he pasado la semana de fiesta, jaja, tanto desproticar para que luego no me dejaran tranquila; supongo que forma parte del ciclo de la vida.

La verdad es que me lo he pasado bien (ha habido cosas interesantes que, si pillo un momento, me gustaría explicar, aunque ahora ya no tiene mucho sentido porque el verano se ha terminado, pero en fin).


Aquel cabreo-crisis que me carcomía por dentro se me ha pasado bastante, a decir verdad, una semana de despreocupaciones me ha dejado como nueva. Ahora mi principal problema se llama...


Universidad (*música catastrofista de fondo*)


Sí, sé que parece una bobada pero... estoy mueeerta de miedo.


Con lo patosa que soy, seguro que me pierdo buscando las clases o cosas por el estilo (quieran Dios, Buda, Alá, Yavë, Ra, Isis, Apolo, Zeus, Afrodita, Karevan, Yavanna y Brad Pitt que tenga el horario bien, porfaporfaporfaporfa *¬*)


Y... no sé, estoy muy nerviosa, empezar una nueva vida -aunque sigo viviendo con mis padres, pero me he propuesto encontrar un piso antes de las navidades-, conocer gente nueva... es un mundo desconocido para mí y, además, un mundo en el que me adentro sola, sin amigas, sin padres... ¡¡¡qué nervios!!!


Conociendo la ley de Murphy -que a mí se me puede aplicar sin errores- seguro que en algo la pifio, pero fijo. Ayyy mamá, dónde me he metido!!!


Bueno, ya está, me he desahogado, ;)


Besazzos, lulilectores, ya os contaré la experiencia (empiezo el martes).


¡Espero sobrevivir!
*Luli*



P.D.: He perdido mi paraguas. ¿Dónde lo habré dejado?

jueves, 11 de septiembre de 2008

Mi vida: un caos



Hola de nuevo, lulilectores.


Tras una larga ausencia, me paso de nuevo por aquí, cómo no, para renegar del mundo.


Antes, añadir que después de terminar con mi trabajo en la tienda me puse de canguro de mis primos durante una semanita y no me lo pasé del todo mal. En estos momentos estoy de secretaria para mi padre, que me ha asegurado que me pagará. Veremos.


Ahora sí, procedo.


No sé por qué, pero la tristeza me persigue. Supongo que os habréis dado cuenta en estos últimos meses de lo aburrida que estoy, siempre quejándome, pero no consigo salir del agujero. No es depresión, tranquilos, pero estoy atravesando una etapa decaída en mi vida. Y quiero saber por qué.


Analicemos mi situación; pondré + para bien y - para mal:


-Terminé los estudios en junio con éxito (aunque agotada), pero con éxito, al fin y al cabo. +


-Me quedé sin viaje (Ibiza) ni vacaciones. -


-Me puse a trabajar en julio, mientras pasaba las mañanas en la autoescuela. +/-


-Llegó agosto y seguí trabajando, aunque tenía las mañanas libres (Me gusta mi trabajo). +


-Me denegaron la solicitud en Hamburgo (el mundo me cayó encima, lulilectores, era como salir de la academia después de estar nominado, qué chasco) -


-Mi tía y mi prima se quedaron con nosotros 12 días. +


-Me dieron un día libre y fui a Terra Mítica con ellas, lo pasé genial. +


-Me matriculé en Valencia. +


-Tras una discusión con unas amigas me quedé sin piso y sin personas para compartir el piso (-), aunque realmente, nunca tuve intención de vivir con ellas, siempre quise compartir piso con gente nueva, por lo tanto, en el fondo, es un aspecto positivo (+) -lo malo es que aún tengo que buscar piso-.


-Empezar la universidad me emociona, a la vez que me intimida muchísimo (no os imagináis lo perdida que voy con los horarios y todo ese rollo; estoy más despistada... horror) +/-


-Vienen Fiestas del Pueblo y me entra pánico. -


Haciendo balance del transcurso/problemas de mi vida... no está tan descompensado. Quiero decir, no hay muchos más aspectos negativos que positivos, más bien está equilibrado. Entonces... ¿por qué estas sensaciones?


Lo que más me asusta en este momento son las Fiestas del Pueblo: estar ahí con 20 amigas en la cochera y luego emborracharse todas las noches deambulando por las verbenas, vamos, lo que se llama ir de fiesta. ¿Por qué no me apetece para nada el plan? ¿Por qué no quiero ni acercarme a mis amigas? ¿Por qué de repente toda la gente que conozco me cae mal? ¿Por qué narices me estoy encerrando tanto en mí misma? ¿Qué me está pasando?


Porca miseria...


He desarrollado mi propia teoría.


Estoy en una época de transición, cambiando de etapa (algunos lo llaman ¿madurar?). Por ejemplo, ya he alcanzado la mayoría de edad. Otro ejemplo: he dejado el instituto y empiezo la Universidad. Son situaciones nuevas que, como todo lo nuevo, al principio despiertan recelo y confusión hasta que te acostumbras. Una vez acostumbrado puede gustarte o no, pero mientras, todo va cambiando.


Yo supongo (hago hincapié en el supongo) que mi problema es que ya estoy harta. Harta del minúsculo e hipócrita pueblo en el que me he criado, que hace años (¡años!) que se me quedó pequeño; harta de ver siempre las mismas caras, la misma gente (aunque esa gente sean mi familia y mis amigos); harta de los mismos lugares, las mismas situaciones, la misma rutina, la misma puñetera comarca, los mismos comentarios... estoy har-ta.


Me veo, no sé, como en una especie de cárcel donde me ahogo, me asfixio. No lo soporto más, necesitaba urgentemente un cambio de vida, de aires, algo nuevo. Me daba pánico pensar en otro año más encerrada en el pueblo, por eso no me quedé corta en poner horizontes: no me bastaba Valencia (50km no es suficente distancia, quería más), escogí Alemania, a tres días de viaje en coche. Allí quería empezar de cero, aprender un nuevo idioma, conocer gente, adaptarme... eso es lo que realmente necesitaba: adaptarme.


Aquí, en mi pueblo, llevo tanto tiempo ya que a estas alturas me he "desadaptado", yo sola necesitaba alejarme, cuanto más mejor, irme por ahí a ver mundo. Vale, vale, soy realista: una persona no puede simplemente decir: me voy a ver mundo, hala, adiós muy buenas, no. Para eso se necesita dinero, cultura, organización... yo soy bastante pasotilla para algunas cosas, pero me han entrado muchas ansias de viajar. ¡Jolín, el mundo es demasiado grande como para pasarse la vida dentro del mismo asqueroso poblacho! Y Andorra no cuenta.


Incluso (y lo digo en serio) me han entrado auténticos arrebatos de decir: paso de estudiar, me cojo un año sabático y me voy a buscarme la vida en el extranjero, cuanto más lejos, mejor. Australia me ha llamado innumerables veces.


Pero lo olvidé porque me hacía ilusión irme p'Alemania. Hasta que... ¡paf! Plan chafado, Luli no puede estudiar en Haburgo lo que le gusta porque no tiene bastante nota (no les sirve un 8,51, no, ellos quieren un 9,10). Todavía lo pienso y aún no me lo creo.


Es decir, que ahora me tengo que conformar con Valencia, que no es lo que quería pero, lo dicho, me tengo que conformar. Yo, la inconformista nata. Y, encima, ahora que puedo empezar una vida nueva, me siento desorientada ante el hecho de salir del nido: es decir, por ganas no será, pero me da miedo hacer las cosas mal, que la gente no sea como me esperaba, que no encuentre un buen piso y me tenga que seguir quedando en mi casa...


Todo eso, mezclado a mi anterior cansancio vital y a las vueltas y vueltas que le doy a todo en mi cabeza, supongo que son las causas de mi crisis existencial, a las pocas ganas que tengo de verle el careto a la gente feliz y, ante todo, supongo que son las causas de que, mientras todos están de fiesta, a mí me apetezca quedarme tranquila y a mi aire durante las celebraciones locales, para relajarme y meter las narices en mis asuntos (véase cosas tan sencillas como: trabajar en mis historias, mentalizarme para la Uni, escuchar música o ver la tele).


Y ahora, tras leer todo esto, diréis: pues sí, no me parece mal que se tome una semana sabática tras todo lo que acaba de pasarle a la pobre Luli. Gracias, lulilectores, pero resulta que habrá gente que no pensará igual. Por ejemplo, mis amigas:


-¿Que noooo vas a saliiir en tooodas las fieeesstaaaas? ¿Por quéeeee? ¡Eres una sosaaa! ¡Aburridaaa!


O, por ejemplo, mis padres (sobre todo ERDM):


-Eres una antisocial.


O, otro ejemplo, la panadera (o, en su defecto, el quiosquero o cualquiera de mis vecinos):


-¿Ah, que no sales? Hm... vaya cosa más extraña en una joven, sísí. Claro, a ti te gusta más leer, siempre te ha gustado leer, ¿no?


¡¡¡JODER SÍ!!! ¿QUÉ PASA? ¿UNA NO PUEDE ENCLAUSTRARSE CUANDO ESTÁ DE BAJÓN O QUÉ? ¿TIENE QUE DAR EXPLICACIONES A TODOS Y DE TODO? ¿NO PUEDE UNA ESTAR SOLA? ¿NO PODÉIS COGEROS TODOS DE LA MANO Y PERDEROS EN EL MISMO BOSQUE?


¡¡¡DEJADME EN PAZ!!!!




Pf... ya está, ya lo he dicho. Lo siento, pero era necesario desahogarme. Hablarlo con alguien sería mucho más complicado, pero me basta con ponerlo aquí, donde nadie te conoce y, quizá, quién sabe, igual alguien se ha sentido igual que tú.


Estoy cansada, muy cansada. No físicamente, sino mentalmente. Quiero descansar. Espero descansar. Buda, Alá, Yavë... ayudadme. Que dentro de un mes se me haya pasado, porfiss.



Y, por último...


Quería daros las gracias, lulilectores: gracias a los que me seguís (ya sea de vez en cuando, ya sea regularmente, ya sea que te has perdido y, tras leer una de mis entradas hayas pensado "¡cómo está el patio...!" y te hayas largado para no volver más...).


Muchas gracias por leerme, aunque sea en silencio.


Muchas gracias también a los que os molestáis en dar señales de vida y me provocáis una ligera sonrisa cuando entro en el blog.


Muchas gracias porque, sin vosotros, no habría blog.


Y si no hubiera blog, Luli no existiría.


Gracias.



Kilos de besazzos,



*Luli*