sábado, 11 de diciembre de 2010

El más profundo y absoluto TERROR


Queridos lulilectores...


Estoy aterrorizada, paralizada, shockeada, atontada, petrificada, asustada... ¡¡¡me faltan adjetivos!!!


El jueves que viene se espera de mí que hable EN PÚBLICO delante de unas 60 o 70 personas aproximadamente. Tengo que hacer una exposición YO SOLA ante un grupo de gente que no conozco DE NADA porque no son mis compañeros habituales de clase, sino un grupo con quien comparto solo una asignatura... y el terror me va a quitar el sueño. Lo veo venir.

Porque encima son una pandilla de sabelotodos empollones, que TIRAN A MATAR con las preguntas del debate, y me juego lo que queráis a que no voy a saber contestar.

Oh, Dios, ¿por qué?

No es que no haya hecho nunca una exposición (en más de la mitad de mis asignaturas de la carrera he hecho exposiciones), pero siempre en grupo, y solo me tocaba hablar unos cinco o, como mucho, diez minutos. ¿De qué narices voy a estar hablando durante MEDIA HORA yo sola? ¿Qué quieren que les cuente? ¿Mi vida desde que nací? NO HAY DERECHO.

ODIO HABLAR EN PÚBLICO, ES ALGO QUE ME MATA.
Y sé que se me da mal porque es algo que he hecho muchas veces. Y cada vez que voy a subirme al estrado (sí, encima de un estrado y todo), me entra PÁNICO total.

OH, DIOSS. ¿POR QUÉ?


Me quiero morir. Lo de imaginar que tu público son tomates no funciona. Y lo de imaginar que están desnudos, tampoco (es más, con la retorcida imaginación que tengo, más de una vez me han entrado náuseas con tales pensamientos y he tenido que cortar de raíz). Llevo fatal eso de ponerme delante de casi un centenar de personas que me van a estar juzgando aunque no me conozcan de nada. Me tiembla todo el cuerpo solo de pensarlo...

CIELOSSS!!! HORROR TOTAL!!!

¿Algún consejo?

Besazzos,

*Luli*

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, no te preocupes, le pasa a todo el mundo. Míralo de esta forma: pon en un lado lo que piensas que es positivo de ti misma presentando, porque ya lo has hecho antes. Por ejemplo, sonrío, a la gente le gusta oirme, se nota que lo que cuento es importante para mí, me han dicho antes que lo he hecho bien. Y en el otro lado, lo que crees que es horrible: se va a notar que estoy nerviosa, me va a temblar la voz, va a ser horrible. Y ahora juzga tú misma qué pesa más en la balanza. Si crees que vas a ponerte muy nerviosa, sobre todo será al principio, los 30 primeros segundos son clave. Así que empieza lanzando una pregunta a la audiencia sobre el tema. Si hablan ellos antes, tú te relajas. Ánimo que te va a salir bien seguro. Si quieres saber más: www.speakandspan.com, en el blog hay unos cuantos consejos. Javier

Luli dijo...

¡Gracias, Javier, por tu consuelo! He consultado el enlace que me has dejado, es muy interesante y tiene consejos útiles. Creo que en el fondo sé que quizá no me salga mal del todo, porque también es verdad que, una vez empiezas a hablar, es fácil seguir un hilo.

Pero lo que más miedo me da no es la exposición en sí, sino tener que enfrentarme a ella... Es algo que me provoca escalofríos por todo el cuerpo. En fin, ya os contaré, a ver qué tal...

¡Un fuerte besazzo!

Luli dijo...

Por cierto: os informo un poco del epílogo de esta horripilante historia de hablar en público.

Al final expuse, pero, como si no me pasa algo es como si no fuera yo, el power point no se abrió correctamente, con lo que tuve que exponer sin soporte visual, lo cual me desorientó bastante y me hizo tropezarme en algunos de los puntos más importantes. ¡Yuju! (*ironía*).

En fin... hecho está T.T

Kizzes! ;)