domingo, 26 de septiembre de 2010

MANDA HUEVOS!!!!!




Queridos lulilectores...


MANDA HUEVOS lo que me ha pasado. Pfffffffffffffffffffffffffff


No es que yo sea gafe, es que yo soy LA gafe. La gafe de los gafes. Vivo en Gafelandia. Peor: en Gafelulilandia. ¡Qué digo! Soy la reina de Gafelulilandia. ARRRGHH!!!


¿A qué viene tanto revuelo? Os lo cuento:


Toda historia de terror tiene un final. Y, como la misma palabra indica, el final tiene poco de divertido: suelen ser terroríficos. Por una vez, mi historia particular de terror no se sale de lo normal y se ajusta a la norma: es un final PARA NO DORMIR.


¿Y qué historia es? Pues a los lulilectores habituales de mi blog no os será desconocida, pero a los que son nuevos, o estén interesados o, simplemente, a los que necesiten recordar de qué hablo, aquí está la PRIMERA PARTE de este cuento horripilante, y aquí la SEGUNDA PARTE, para refrescaros la memoria.


Resumo: se trata de la historia de la agenda perdida de hace dos Navidades, allá por el 2008, cuando Luli era buena persona y bastante inocentona, dicho sea de paso. Un día tonto Luli decidió que perder la agenda de la Universidad en una aula sería de lo más divertido, así que se la dejó abandonada debajo de un banco y, de no haber sido por un simpático sujeto que decidió devolvérsela y comunicárselo por email, Luli ni se habría enterado.


Luli, entonces, henchida de gratitud y de bastante tontería, le mandó al susodicho una ñoña tarjeta de felicitación navideña como muestra de gratitud, por el susto que se había llevado al darse cuenta de que, efectivamente, se había quedado sin agenda, y Luli se quedó tan pancha, toda satisfecha de la buena acción.


Pero la historia no acabó ahí, como supondréis, porque nada más y nada menos que CINCO meses después, Luli descubrió, con gran horror, que el sujeto amable no había sido un cívico alumno cualquiera, o el conserje en su defecto, sino que se trataba de UN PROFESOR al que Luli, toda INGENUA, había mandado una TARJETA DE FELICITACIÓN. Repito la gravedad de la situación por si a alguien no le ha quedado del todo claro: LE MANDÉ UNA TARJETA DE FELICITACIÓN ÑOÑA A UN PROFESOR QUE NO CONOCÍA DE NADA EN NAVIDAD. SOY O NO SOY LA REPERA?


Pues biennnnnnnnnn: AHORA es cuando viene la tercera (y peor) parte del asunto, aunque supongo que os lo estaréis imaginando ya... ESTE AÑO ME HA TOCADO ESE PROFESOR EN UNA ASIGNATURA TRONCAL OBLIGATORIA, DOS AÑOS DESPUÉS DEL FATÍDICO SUCESO. AHORA NO ES UN PROFESOR CUALQUIERA, NO, AHORA ES MI PROFESOR.


¡¡¡Es que, si lo recuerda y me reconoce por el nombre, puede pensar cualquier cosa!!! Que yo soy una pre-pelota, o que a lo mejor me gustaba, o que le admiraba, o que así me aseguraba un aprobado, o... ¡¡¡vete tú a saber!!! Es que me he puesto yo sola en un compromiso, ya ves tú qué necesidad había. De verdad... no me meto en más líos porque no los hay, en serio (comprobado está: ¿que no hay lío al canto? Luli como Juan Palomo: yo me lo guiso... Y YO ME LO COMO) ¬¬


Santo Cielo. ¡¡¡¡Quieran Dios, Buda, Alá, Yavë, Ra, Zeus, Karevan, Paladine, Romeo, Julieta, Brad Pitt, Mortadelo, Filemón, Pipi Calzaslargas, Manolito Gafotas, Samsagaz, Rhianna y Lina Morgan que, POR FAVOR, no se acuerde del incidente!!!! O me acabaré de hundir en la miseria, en serio os lo digo.


¿Sabéis la sesión de VERGÜENZA que me tendría que meter entre pecho y espalda en caso de que lo recordara? Se me pondrían coloradas hasta las uñas de los pies. ¡¡¡ESO ME PASA POR SER BUENA PERSONA!!! NARICES NARIZUDAS YA CON LA BUENPERSONIDAD. SE ACABÓ.


Si eso me lo olía ya, desde el día en que vi ese cartel colgado en la puerta... tendría que haber sospechado. No supe verlo. Pero lo tengo muy claro, si me dice algo (RECEMOS para que no se acuerde, o para que si se acuerda, no me diga nada) me pienso hacer la loca, en serio. Como si la que no se acordara (cuando en realidad lo único que quiero es olvidarlo) fuera yo.


En cuanto al profesor en sí, jopé, es que encima es joven y simpático. Guapo no, porque guapo no es (es calvo, además), pero es muy divertido, bastante interesante y de los más jóvenes que he tenido (solo 34 años). Aunque creo que es gay, lo cual me tranquiliza un poco. Pero con lo rematadamente gafe que soy (porque lo soy) tendré que estar alerta, porque fijo que esto no se acaba aquí, seguro que aún queda algún episodio para epílogo o algo por el estilo.


En fin... que no puede ser conmigo, y que MANDA HUEVOS lo que me gusta complicarme mi, ya de por sí excéntrica, vida.


Besazzos... y que ojalá nunca os metáis en tonterías de esta guisa, no os lo deseo a nadie. xD


*Luli*

4 comentarios:

Ilusia dijo...

Hija, si es que te pasa de todo. Si estuviese estaría igual... que verguenza jejeje. Tu hazte la loca, como si no hubiese pasado xDDD

Luli dijo...

La verdad es que yo tampoco lo entiendo. Gracias por pasarte, leerme y comentar. ¡Besazzos!

Teresa dijo...

Ay señoooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooor!!!! Chica qué mala suerte!!!

Pensemos que en tu clase hay much gete y no se va a aprender los nombres ni los va a mirar, de modo que no se acuerde del tuyo, y que cuando vio tu tarjeta se sintió correspondido y agradecido, y la guardó en un cajón pero ya está... jajaja

Suerte Luli! Besazos!

Luli dijo...

Jajaja Ter, espero que tengas razón!!! Además, ahora que nos ha dado clase y todo, puede que incluso lo agradeciera de verdad, parece un poco "happy" el profesor este; el típico que vive en el mundo del Yupi...

(Aun así, recemos para que ni se acuerde ni le apetezca acordarse xD)

ufff...

kizzes!!