Queridos lulilectores...
No sé si alguna vez he comentado que detesto la cocina y cocinar. Bien, pues parece ser que eso está cambiando o que, por lo menos, no me queda más remedio que cocinar para sobrevivir en el nuevo piso de Valencia. Todavía no os he hablado mucho sobre eso porque aún no me han puesto Internet allí y no puedo comunicarme con el exterior, y cuando vengo a Tavernes (como ahora, en fin de semana) aprovecho Internet al máximo para mis deberes, que son todos a través de la red.
En fin, pero lo que realmente venía a contaros es que hoy he hecho mi primera comida para toda la familia, un arroz que suelo preparar con verduras y carne picada; lo que pasa es que me ha salido más pastoso porque de normal tengo la medida para una persona, y para cuatro es más complicado. Yo lo he encontrado algo insípido, pero mi familia ha insistido en que estaba bueno; yo creo que para darme ánimos, lo cual tampoco está del todo mal.
La última vez que lo hice (en Valencia) mis compañeros de piso se quedaron boquiabiertos, mirando mi plato con envidia y metiendo la cuchara a traición, para probarlo. Repito, no es que mi arroz sea una maravilla, o algo del otro mundo, pero... no me sale del todo mal.
Para alguien que siempre ha odiado la cocina es un comienzo, ¿no?
¡Seguiré informando!
Besazzos!
*Luli*